Darío Aguilar
Darío Aguilar
Apuntes sobre papel
por Pablo de Monte
Detrás de la trama de líneas, colores y texturas que representan objetos que conocemos, está eso que Darío nos cuenta. Nos relata una ficción que tendremos que completar, un manifiesto que tendremos que interpretar.
Al iniciar la lectura del texto visual, hacemos un inventario de lo que vemos, como si fuésemos a contár- selo a alguien incapacitado de ver. Después, cuando hemos anotado en un papel: 1 avión siniestrado, 5 personas semidesnudas en extrañas poses, unos paisajes fragmentados, unos cortes quirúrgicos de tes- tículos y unos huevos donde nada nacerá, nos damos cuenta que esto no alcanza para construir nuestro propio relato, complementario al de Darío. Nos queda otra posibilidad, la de articular los distintos signos, los diferentes objetos que tenemos anotados en el papel.
Ahí comienza algo: es el punto que marca en un mapa nuestra ubicación, es el lugar que tenemos asig- nado, como sujetos, en un cuadro. Desde esa señal nuestro derrotero es incierto, tan incierto como la li- bertad que nos propone el artista, podemos elegir cualquier camino de los que ya están marcados o de-dicarnos a trazar otros. También existe la posibilidad de ir sin rumbo, ir por el paisaje y encontrarnos sor- presivamente con todos esos objetos que anotamos en un papel. Anotación que después de cierto tiem- po, solo existirá en nuestra memoria.